Desde la Federación Nacional de Arroceros – Fedearroz, condenamos de manera enérgica el atentado contra el precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay, así como los diferentes actos violentos que hemos vivido en los últimos días en todo el territorio nacional. Estos hechos no solo atentan contra la vida y la integridad de los ciudadanos colombianos, sino también contra la democracia, el respeto por las diferencias y la posibilidad de construir un país en paz.

Expresamos nuestra solidaridad con la familia del doctor Uribe su equipo de trabajo, y elevamos nuestras oraciones por su pronta recuperación, así como por todas las familias victimas del conflicto.

Estos lamentables hechos deben llevarnos a una profunda reflexión sobre el lenguaje y las actitudes que se están normalizando en nuestra sociedad. El país necesita, más que nunca, que el lenguaje político y social sea un vehículo de unión, no de odio; de construcción, no de destrucción.

Desde el sector arrocero hacemos un llamado a todos los productores y actores del campo a mantenerse unidos, a fortalecer los lazos de solidaridad y a seguir apostando por el diálogo como la herramienta fundamental para resolver los conflictos. La división solo debilita los esfuerzos que hacemos a diario por construir un mejor país.

Colombia necesita un entorno que propicie el desarrollo, el fortalecimiento de capacidades y la generación de empleo y riqueza en las regiones rurales. Pero, por encima de todo, necesita garantías de seguridad. Este entorno es una condición necesaria para que podamos desde el sector arrocero garantizar la seguridad y soberanía alimentaria que hemos logrado durante 78 años, desde cuando fue fundada la Federación en 1947.

Hoy más que nunca, reafirmamos nuestro compromiso con la vida, la democracia, el trabajo digno y el respeto. Seguiremos trabajando por un campo en paz, productivo y con oportunidades para todos.

Foto: Daniel Cely. https://www.pexels.com/es-es/foto/paisaje-montanas-naturaleza-hombre-13809325/